La Plaza de Toros Carmelo Pérez fue inaugurada en 1847 y su nombre rinde homenaje al célebre torero de comienzos del siglo XX. Esta plaza es famosa porque en ella se vieron corridas de toreros destacados como Armillita, Calesero y Rodolfo Gaona. Es un edificio sencillo que cuenta con el encanto austero de una plaza tradicional, en tonos ladrillo y rojo.